viernes, 14 de enero de 2011

¿Qué sabemos de nuestros neumáticos?


El fabricante de neumáticos Goodyear quiere conocer las creencias y prácticas de los conductores europeos. Para ello, qué mejor forma que preguntarles. El estudio se realizó a un total de 3.500 conductores, 500 de cada país: Alemania, Bélgica, España, Francia, Polonia y Reino Unido. El requisito para participar era ser un conductor activo (más de un kilómetro por año).
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El 30% de los encuestados no sabe si tiene
neumáticos de invierno o verano.
Los conductores europeos son conscientes de que al subir al coche son los primeros que pueden mejorar la seguridad vial al cumplir las normas. Pero, pese a que sabemos que no hay que hacerlo, no cumplimos las normas. Así, nos ponemos a nosotros y, lo que es peor, al resto en peligro. Los españoles, por ejemplo, somos los que más pisamos el acelerador al ver el semáforo en ámbar. Y eso que sabemos que el ámbar quiere decir que nos detengamos a no ser que frenar en esa ocasión conlleve peligro.

Cuidado al desplazarse en época invernal

En esta época invernal, con vacaciones y sus consiguientes desplazamientos, hay que ser especialmente precavidos con los neumáticos. Y más a la vista de los resultados que arroja la encuesta.
Uno de cada tres encuestados admite saber "poco o muy poco" sobre la forma en que el tipo de neumático influye en la distancia de frenado o en el agarre sobre la carretera. El 43% de los conductores piensa que se puede conducir sobre nieve con neumáticos de verano si se tiene cuidado, lo que constituye un grave peligro para la seguridad. Los conductores deben saber cómo los neumáticos adecuados utilizados en las condiciones adecuadas pueden contribuir a la seguridad vial en general.

A la hora de montar el neumático

Lo primero que hacemos mal es intentar alargar la vida del neumático más tiempo del conveniente. Una conducción eficiente y poco agresiva prolongará su vida, pero no eternamente. Cuatro de cada diez conductores españoles apuran más de lo necesario el cambio de neumáticos.
Lo siguiente que hacemos mal es el propio cambio de neumáticos. Siete de cada diez conductores tienen problemas diferenciando un neumático de otro y el 56% no saben distinguir si los neumáticos de su coche son de verano, invierno u otro tipo. De hecho, el 34% de los encuestados no estaban seguros de si los neumáticos de sus coches eran de verano o invierno.

Hay que comprobar la presión y el dibujo

En cuanto a los neumáticos, el estudio pone de manifiesto que los conductores no revisan la presión de sus neumáticos correctamente. Es habitual cometer alguno de estos tres errores:
1) No comprueban la presión de sus neumáticos antes de salir.
2) La comprueban cuando los neumáticos están calientes, lo que da resultados incorrectos.
3) La regulan sin tener en cuenta la carga el vehículo. La diferencia entre llevar el coche vacío o cargado hasta arriba es importante.
El 73% de los encuestados en la UE aseguran conocer la adecuada presión de los neumáticos para diferentes condiciones de conducción, pero casi la mitad de ellos reconocen no saber cómo comprobar la presión (cuando los neumáticos están fríos).

La ley

La Unión Europea no es capaz de ponerse de acuerdo en una legislación común en cuanto al cambio de neumáticos. Algunos como Alemania obligan a los conductores a cambiar sus neumáticos de verano a los de invierno, mientras que otros, como el Reino Unido, no tienen ninguna legislación al respecto. Incluso hay otros países con leyes diferentes que a menudo son opuestas a las de sus países vecinos.
Que no sea obligatorio y que no se ve como un gasto necesario, pese a que lo es, son los porqués de no cambiar de forma conveniente los neumáticos.
Fuente: eleconomista.es

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